Zara: estimulador control remoto para el Clítoris
Estaba tranquila en casa, cuando llamaron al timbre. Un paquete me esperaba... ¿Qué será? Si yo no he pedido nada esta semana... Y resulta que al abrir la caja me encuentro un regalo de Destino Kink.
Por si no conocéis el sitio, es una tienda de juguetería erótica que lo llevan Sexólogas y, además de terapia y formación, han abierto una tienda de juguetería erótica con la que voy a colaborar de forma puntual dándoles mi opinión acerca de algunos juguetes. (Que no es que tenga yo mucha repercusión, pero me molesto en probar las cosas de verdad y ver qué funcionalidad tienen realmente.)
El tema, que abro la caja y había:
- Un plumero de Bijoux indiscrets (que es una marca muy conocida y prestigiosa de cosmética y complementos eróticos).
- Una vela de masaje de fresas con champán de Shunga (que es una marca muy famosa de cosmética erótica).
- Y un juguete de control remoto para el clítoris que es del que voy a hablar, (guiño, guiño, codazo, codazo.)
- Una monodosis de lubricante anal.
- Además de un panfletillo sobre cómo debo cuidar los juguetes.
Material: Está hecho con silicona suave, tanto el juguete, como el mando.
Características: Es recargable y tiene una potencia muy, muy interesante. Tiene 10 modos distintos de vibración. (Luego no hace falta tantos, con uno fuerte y constante es suficiente, las cosas, como son!). Viene con una braguita con un bolsillo preparado para usar con el juguete. Es de encaje monísima, y, aunque es talla única, tiene pinta de ser más o menos una L (que normalmente estas cosas las hacen para mantis religiosas).
Pros: Me flipa que sea de color negro porque se conserva mejor con el tiempo. La forma que tiene es mi favorita para masturbación y para ciertas posturas. Es muy parecido al Nea de lelo, pero un poquito más grande.
¡Tenéis que probarlo!
Dida
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